Mercedes
Jiménez Espinosa
PRIMER VIAJE
MISIONERO DE PABLO
HECHOS 13:2.
Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a
Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado. 3. Entonces, habiendo
ayunado y orado, les impusieron las manos y los despidieron.
El primero de
ellos, según el relato del libro de los Hechos de los Apóstoles,1 fue
movido por una revelación del Espíritu Santo a emprenderlo junto
con Bernabé y con Juan Marcos. El viaje comenzó aproximadamente
entre los años 47 a 48 d. C. Embarcaron en Seleucia,
que era el puerto de la ciudad de Antioquía de Siria (Seleucia
distaba pocos kilómetros de Antioquía).
De allí, se
dirigieron por barco a Chipre, realizaron su tarea misional en la costa
oriental de la isla, en una ciudad llamada Salamina, que se cree estaba a
pocos kilómetros de la hoy ciudad de Famagusta; de la costa oriental
cruzaron la isla hasta la costa occidental, hacia una ciudad
llamada Pafos. De allí, embarcaron hacia la costa del Asia
Menor, hasta la ciudad de Perge, en Panfilia, posiblemente
pasando por la ciudad de Atalía (muy cercana a Perge y al puerto de
esta ciudad), que por entonces era una provincia del imperio Romano.
De allí, sólo
con Bernabé, Pablo se dirigió a la ciudad de Antioquía de Pisidia. Se
asentaron un tiempo en esta ciudad,y de allí partieron para la ciudad
de Iconio, que se encontraba en la provincia romana de Galacia.
Por allí pasaba una ruta principal que unía la importante ciudad
de Éfeso con Siria. Desde allí se dirigieron hacia la ciudad de
Listra, en la región de Licaonia.
Pablo y
Bernabé partieron de Listra a Derbe, y desde esta ciudad regresaron
sobre sus pasos a Listra; luego a Iconio y después a Antioquia de Pisidia. De
allí, fueron a Perge; y de Perge, al puerto de Atalia, donde se embarcaron para
Antioquía de Siria. HECHOS 14:20. Pero rodeándole los discípulos, se levantó
y entró en la ciudad; y al día siguiente salió con Bernabé para Derbe.21. Y después
de anunciar el evangelio a aquella ciudad y de hacer muchos discípulos,
volvieron a Listra, a Iconio y a Antioquía,22. confirmando los ánimos de los
discípulos, exhortándoles a que permaneciesen en la fe, y diciéndoles: Es
necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios.
Mercedes
Jiménez Espinosa
SEGUNDO VIAJE
MISIONERO DE PABLO HECHOS
(15:36)
Comienza este
viaje con una discusión entre Pablo y Bernabé, que se separaron el uno del
otro; Bernabé, tomando a Marcos, navegó a Chipre, y Pablo, escogiendo a Silas,
salió encomendado por los hermanos a la gracia del Señor.
En este
segundo viaje misionero parten de Antioquia, recorriendo la península de
Anatolia, visitando aquellas comunidades que ya habían fundado con
anterioridad. En primer lugar atraviesan Derbe y después encaminan sus pasos
hacia Listra. Más tarde siguen recorrido por la región de Galacia del Sur,
atravesando Misia y bajando hasta Tróade; finalmente, inquiridos por el
Espíritu se dirigen hacia la región de Macedonia. En Listra tiene lugar la
elección de un cristiano piadoso llamado Timoteo como acompañante de Pablo en
las siguientes etapas de este segundo viaje. (16:1). "Y al pasar por las
ciudades, les entregaban las ordenanzas que habían acordado los apóstoles y los
ancianos que estaban en Jerusalén, para que las guardasen. Así que las iglesias
eran confirmadas en la fe, y aumentaban en número cada día pero nos encontramos
con la intervención del Espíritu Santo, que dirige sus pasos lejos de Asía con
dirección a las ciudades de Macedonia. (16:1-6).
Timoteo,
acompañará a Pablo en este ciclo viajero, siendo uno de los discípulos más
fieles del Apóstol de los gentiles.
Zarpando
desde el puerto de Tróas se dirigen en barco a la isla de Samotracia y, desde
ésta, al puerto de Neápolis en la costa macedonia: desde allí parten hacia
Filipos, donde tendrán lugar los hechos más importantes de estos versículos del
segundo viaje paulino.
Pablo en
Filipos. (16 11-40).
En Filipos
las primeras personas en escuchar el mensaje de salvación de Pablo son las
mujeres de la ciudad. Y también nos encontramos con un relato de exorcismos,
efectuado en la persona de una esclava que estaba poseída por un espíritu
adivino. Los dueños de la esclava denuncian a Pablo por razones obvias ante las
autoridades romanas. Ante estas acusaciones los habitantes de Filipos se
amotinan contra nuestros mensajeros y éstos son azotados inmediatamente por las
autoridades romanas, quizás con el fin de calmar a la turba. Después de ser
encarcelados nos encontramos con una historia interesante de liberación: el
Espíritu, de nuevo, interviene a favor de la expansión de la Palabra aunque las
dificultades sean enormes. “Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban
himnos a Dios; y los presos los oían. Entonces sobrevino de repente un gran
terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al
instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron”.
Siguiendo la
interpretación teológica lucana, a través de un hecho natural, que es
interpretado como una intervención providencial del Espíritu, Pablo y Silas son
liberados, sin olvidar la conversión del carcelero y toda su familia. El final
de este relato de liberación insiste en la condición de ciudadano romano del
Apóstol y la convicción de las autoridades romanas de la ciudad de haber
violada las garantías procesales que prescribía. Y los alguaciles hicieron
saber estas palabras a los magistrados, los cuales tuvieron miedo al oír que
eran romanos. Y viniendo, les rogaron; y sacándolos, les pidieron que salieran
de la ciudad. Entonces, saliendo de la cárcel, entraron en casa de Lidia, y
habiendo visto a los hermanos, los consolaron, y se fueron.
Pablo en
Tesalónica y Berea. (17:1-15).
Pasando por Anfípolis
y Apolonia llegan hasta Tesalónica, predicando en esta ciudad. Después de ésta
se dirigen hacia Berea, en donde ocurrirán hechos similares.
Pablo se
dirige a los judíos en la sinagoga. Éstos rechazan el mensaje de Cristo
que Pablo les predicaba, sin embargo el mensaje de Pablo tiene una mejor
acogida entre los gentiles. Los judíos enfadados por el éxito del mensaje a los
gentiles provocan la persecución de Pablo y Silas. Después de algún alboroto
Jasón, paga la fianza para que Pablo y Silas sean liberados, enviándolos hacia
Berea. En esta ciudad se suceden similares acontecimientos. Los judíos de
Tesalónica bajan hasta Berea con las mismas intenciones, de modo que provocan
la ira contra el Apóstol de los gentiles. Pablo, Silas y Timoteo con la ayuda
de algunos miembros de la comunidad cristiana, son ayudados a salir de la
ciudad: Pablo hacia Atenas, permaneciendo Silas y Timoteo en la ciudad.
Pablo en Atenas. (17,16-34).
Pablo se
encamina sin sus dos acompañantes hacia Atenas. La mayor parte del recorrido se
realiza en barco costeando.
En Atenas se
produce el importante discurso a los paganos en el Areópago. La
importancia de este acontecimiento consiste en que el Apóstol predica en el
centro de la cultura helenística, cultura que por lo demás, se encontraba muy
alejada en su concepción del mundo de las categorías y tradiciones de la
cultura judía. Por tanto. Pablo se encuentra en la obligación de ofrecer una
predicación sensiblemente distinta a la ofrecida en las sinagogas judías o a
las gentiles familiarizados con la religión y las tradiciones hebreas. De esta
manera, la estructura del discurso en el Areópago es distinta: comienza el
discurso con un afán conciliador hacia la cultura y la religiosidad pagana,
aprovechando la inscripción al Dios desconocido como punto de arranque de su
mensaje, finalizando su discurso con la afirmación cristológica fundamental de
la resurrección de Jesús. A pesar de todo, unos pocos se convierten a la
fe.
Pablo en
Corinto. (l8.1-18).
Costeando
frente al Peloponeso llega Pablo a la ciudad de Corinto.
Esta es la más importante de todas
las etapas de este segundo viaje. Pablo conoce en la ciudad a un matrimonio de
curtidores, con los cuales entablará amistad y convivirá durante un
considerable periodo de tiempo. Silas y Timoteo se vuelven a reencontrar con
Pablo después de su peregrinaje por Macedonia. A pesar de ser rechazado el
mensaje en la sinagoga es digno de mención la conversión del jefe de la
sinagoga local Crispo y su familia. “Entonces el Señor dijo a Pablo en
visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; porque yo estoy contigo, y
ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo
en esta ciudad. Y se detuvo allí un año y seis meses, enseñándoles la palabra
de Dios”. En esta ciudad, como era de esperar, al final las malas artes de los
perseguidores judíos entran en acción, llevando a Pablo ante las autoridades
romanas. “diciendo: Este persuade a los hombres a honrar a Dios contra la ley.
Y al comenzar Pablo a hablar, Galión dijo a los judíos: Si fuera algún agravio
o algún crimen enorme, oh judíos, conforme a derechos yo os toleraría. Pero si
son cuestiones de palabras, y de nombres, y de vuestra ley, vedlo vosotros;
porque yo no quiero ser juez de estas cosas. Y los echó del tribunal.
“Pablo se despidió de los hermanos y navegó a Siria, y con él Priscila y
Aquila, habiéndose rapado la cabeza en Cencrea porque tenía hecho voto”.
Pablo regresa a Antioquia. (18:19-22).
Y llegó a
Efeso, y los dejó allí; y entrando en la sinagoga, discutía con los judíos, los
cuales le rogaban que se quedase con ellos por más tiempo; mas no accedió, sino
que se despidió de ellos, diciendo: Es necesario que en todo caso yo guarde en
Jerusalén la fiesta que viene; pero otra vez volveré a vosotros, si Dios
quiere. Y zarpó de Éfeso. Habiendo arribado a Cesárea, subió para saludar a la
iglesia, y luego descendió a Antioquia.
Mercedes
Jiménez Espinosa
Parte por mar en dirección a Éfeso; desde aquí, también por mar se dirige hacia
Cesárea; desde esta ciudad continua, probablemente costeando hasta el punto de
partida de este segundo viaje: la ciudad de Antioquia. En esta partida le
acompañan el matrimonio de fabricantes de tiendas durante un trecho; éstos se
separan de Pablo en la escala de Éfeso. En esta ciudad el Apóstol predicó con
cierta brevedad en la sinagoga, prometiendo su próxima vuelta. En Cesárea su
estancia es muy breve, partiendo después de una rápida visita, hacia Antioquia.
TERCER VIAJE
MISIONERO (18:22)
En este
tercer viaje Pablo llevó a cabo la obra más admirable de toda su vida, regresa
a Antioquia y ahí comienza su tercer viaje. Habiendo arribado a Cesárea, subió
para saludar a la iglesia, y luego descendió a Antioquía. Y después de estar allí
algún tiempo, salió, recorriendo por orden la región de Galacia y de Frigia,
confirmando a todos los discípulos.
Pablo después
de recorrer las regiones superiores vino a Efeso (19:1) y Grandes multitudes de
adoradores de Diana se hicieron cristianos. Se fundaron iglesias en las
ciudades de 160 km. alrededor. Efeso llegó rápidamente a ser el centro
principal del mundo cristiano. Aquí vivió su vejez el apóstol Juan. Aquí se
publicaron por primera vez 8 de los libros del Nuevo Testamento, el evangelio de
Juan, sus 3 epístolas, Apocalipsis, Efesios, 1 y 2 Timoteo, y probablemente 1 y
2 de Pedro y Judas.
Pablo en Éfeso.- Tenía 225,000 y era la capital de Asia, lo que hoy se conoce
como Asia Menor. Éfeso era la puerta de entada de Asia Menor y sede del culto
de Diana.
El Templo de Diana, en Éfeso, era una de las 7 maravillas del mundo antiguo.
Tardó 220 años en construirse. “Del mármol mas puro, brillaba como meteoro”. El
culto a Diana era “impuro e impúdico y lleno de vicios”. Pues bien esto era una
buena oportunidad para el apóstol Pablo que se le presentaba para compartir del
Evangelio a todas las multitudes que desde las regiones vecinas acudían a los
festejos, obteniendo muy buenos resultados que llegó a peligrar el prestigio de
Diana.
Pablo sacudió hasta sus cimientos a Éfeso, una ciudad tan poderosa. ¿no es
admirable que en aquellos primeros días sin edificios para iglesias o
seminarios, y a pesar de la persecución, la iglesia progresó mas rápidamente de
lo que se había hecho en época posterior. Pablo llama a su permanencia en Éfeso
“tres años”. (19:8).
Milagros especiales.- (19:11). Los milagros especiales fue la razón principal
del éxito de Pablo.
Solamente en
ciertas épocas pudo Pablo hacer milagros, no se nos dice que haya hecho
milagros en Damasco, Jerusalén, Tarso, Antioquia, Derbe, Atenas o Roma. Si hizo
milagros en Chipre, Iconio, Listra, Filipos, Corintios, Éfeso y Malta. El Señor
Jesús usó Su propio criterio en conferir poderes sobrenaturales. En Éfeso multitudes
de desconocidos eran sanados mediante pañuelos que habían tocado el cuerpo de
Pablo (19:12). Sin embargo en otra época Pablo no podía sanar a su amigo amado
y colaborador Timoteo (2Timoteo 4:20).
Pablo en
Macedonia y Grecia. (20:1) Llamó Pablo a los discípulos, y habiéndolos
exhortado y abrazado, se despidió y salió para ir a Macedonia. Y después de
recorrer aquellas regiones, y de exhortarles con abundancia de palabras, llegó
a Grecia. Después de haber estado allí tres meses, y siéndole puestas asechanzas
por los judíos para cuando se embarcase para Siria, tomó la decisión de volver
por Macedonia. No solamente enseñaba y afirmaba a las iglesias, sino que
también recogía la ofrenda para los pobres de Jerusalén.
Arresto de
Pablo en Jerusalén. (21) Después de separarnos de ellos, zarpamos y fuimos con
rumbo directo a Cos, y al día siguiente a Rodas, y de allí a Pátara. Y hallando
un barco que pasaba a Fenicia, nos embarcamos, y zarpamos. Al avistar Chipre,
dejándola a mano izquierda, navegamos a Siria, y arribamos a Tiro, porque el
barco había de descargar allí. Y hallados los discípulos, nos quedamos allí
siete días; y ellos decían a Pablo, que tal viaje involucraba su
encarcelamiento, aún Lucas se une a tal ruego, pero en la mente de Pablo estaba
definitivamente resuelto que era la voluntad de Dios, aún cuan do significara
su muerte. Y abrazándonos los unos a los otros, subimos al barco, y ellos se
volvieron a sus casas. Y nosotros completamos la navegación, saliendo de Tiro y
arribando a Tolemaida; y habiendo saludado a los hermanos, nos quedamos con
ellos un día. Al otro día, saliendo Pablo y los que con él estábamos, fuimos a
Cesárea; y entrando en casa de Felipe el evangelista, que era uno de los siete,
posamos con él. Después de esos días, hechos ya los preparativos,
subimos a Jerusalén. Cuando llegamos a Jerusalén, los hermanos nos recibieron
con gozo. Pablo consideraba este viaje un medio práctico de demostrar la unidad
de la iglesia y ahora quería coronar su obra con una muestra verdadera de amor
fraternal entre judíos y gentiles. Visto de esta manera, esta visita de Pablo a
Jerusalén es uno de los eventos históricos más importantes de Nuevo Testamento.
Pero cuando estaban para cumplirse los siete días, de reunión, unos judíos de
Asia, al verle en el templo, alborotaron a toda la multitud y le echaron mano,
este, tomando luego soldados y centuriones, corrió a ellos. Y cuando ellos
vieron al tribuno y a los soldados, dejaron de golpear a Pablo. Entonces,
llegando el tribuno, lo detuvo y le mandó atar con dos cadenas, Pablo es
enviado a Cesárea capital de Roma, por un grupo considerable de soldados
romanos (23:23-25).
Encarcelamiento
de Pablo en Cesárea. Cesárea era el lugar en donde, 20 años antes, Pablo había
recibido en la iglesia al primer gentil. Cornelio era oficial del ejército
romano. Quizás esta sea una de las razones porqué Félix sabía algo del
“Camino”. (24:14).
Lucas estuvo
con Pablo en Cesárea. Se cree que en este tiempo haya escrito su Evangelio.
Es la única visita de Lucas a Jerusalén, de que se tiene noticias. Sin
duda aprovechó toda oportunidad de visitar a menudo Jerusalén, y de conversar
con todos aquellos apóstoles y colaboradores de Jesús que pudiera hallar.
Pablo ante
Félix. (24:1-27). Los cargos(5): “pestilencia”, muy vago; “promotor de
sediciones”, completamente falso, ya que Pablo siempre enseñaba la obediencia
al gobierno; “intentó profanar el Templo” introduciendo en él a
Trófimo (21:29) cosa que no había hecho; “caudillo de la secta de los
nazarenos”, lo cual él reconoció como cierto y que no era violación de la ley
alguna, ni judía ni romana. Pablo jamás omite hablar de la resurrección (15).
Félix era
casado con una judía, estaba familiarizado con las costumbres judías, y algo
sabía de Cristo. Fue profundamente impresionado, y mandó llamar a Pablo para
que le explicara mas extensamente el Evangelio, de cuyas implicaciones quedó
espantado. Pero su avaricia (20) le impidió aceptar a Cristo, como también
soltar a Pablo.
Festo fue
nombrado sucesor de Félix en el año 60 D. C. y entre la salida de Félix y la
llegada de Festo fue que la turba d Jerusalén aprovechó la ausencia de un
oficial ejecutivo romano para matar a Santiago.
Pablo ante
Festo. (25:1-12). Los judíos todavía conspiraban para acechar a Pablo (3), pues
parece que tenían pocas esperanzas de convencer a un gobernador romano de que
Pablo hubiere hecho algo digno de muerte. Al ser acusado ante Festo, y viendo
que éste procuraba agradar a los judíos y que no había esperanzas de que se le
hiciera justicia, Pablo resueltamente afirmó a Festo que sí había hecho algo
digno de muerte estaba dispuesto a morir, y apeló a César, lo cual como
ciudadano romano tenía derecho de hacer. Con esto Festo nada podía hacer sino
admitir su apelación. El césar reinante era Nerón, monstruo romano. Pero Pablo
sabía que si dejaba la causa en manos de Festo, sería entregado al Sanedrín, lo
cual significaba la muerte segura. Escogió pues a Nerón. Además él quería
llegar a Roma.
Pablo ante
Agripa. (25:13-26). El discurso de Pablo ante Agipa y su sermón en Atenas
generalmente se consideraban dos de los mejores ejemplos de oratoria que
contiene la literatura. Ambos son muy breves.
Festo no
lograba hallar ningún cargo contra Pablo que fuera digno de presentarse ante
César, y pensaba que quizás Agripa le pudiera ayudar.
Pero agripa
estaba plenamente convencido de que Pablo era inocente de todo mal. (26 al 27).
Pablo llega a
Malta, y ahí hace algunos milagros, después llegaron a Siracusa por tres días.
De allí, costeando alrededor, llegamos a Regio; y otro día después, soplando el
viento sur, llegamos al segundo día a Puteoli, donde habiendo hallado hermanos,
nos rogaron que nos quedásemos con ellos siete días; y luego fuimos a Roma, de
donde, oyendo de nosotros los hermanos, salieron a recibirnos hasta el Foro de
Apio y las Tres Tabernas; y al verlos, Pablo dio gracias a Dios y cobró
aliento. (28).
En Roma, por
fin. Los cristianos salieron para recibirle. Y Pablo permaneció dos años
enteros en una casa alquilada, y recibía a todos los que a él venían, predicando
el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente y sin
impedimento. Durante estos dos años Pablo escribió Efesios, Filipenses,
Colosenses, Filemón, y posiblemente Hebreos, si es que él fue el autor de ese
libro.
Mercedes
Jiménez Espinosa
CUARTO VIAJE DE PABLO
(VIAJE A ROMA)
Habiendo
culminado su tercer viaje misionero, el apóstol Pablo llega a Jerusalén, en
donde fue apresado injustamente por predicar la palabra de Dios.
Luego de comparecer ante el pueblo (sus propios compatriotas
judíos) y ante varios personajes en autoridad, Pablo apela al César, al
parecer injusto el proceso legal que se le estaba llevando. Aunque él era
judío, también tenía ciudadanía romana, por lo que tenía derecho a ser tratado
como tal; y a él apeló a ese derecho.
Así, fue
llevado como prisionero del impero romano en un largo viaje hacia Roma,
la capital del imperio, en donde comparecería personalmente ante el César para
exponer su caso.
HECHOS 9:15
El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi
nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de
Israel;
Veamos los
detalles de este cuarto viaje de Pablo:
De Jerusalén hasta el puerto de partida:
CAP.27
Recorrido:
Partieron del puerto de Cesarea Marítima, arribando en una jornada al puerto
de Sidón. Desde esta ciudad, donde permanecieron varios días, se
dirigieron, costeando entre Chipre y Cilicia, a Mira; esta
travesía duró unos quince días. Desde Mira, reemprendieron el viaje
hacia Creta, arribando en el puerto de Lasea (Puerto Hermoso).
Sucesos: Pablo fue
embarcado junto a otros prisioneros rumbo a Italia. En la escala en Sidón
se le permitió visitar a sus amigos y ser atendido por ellos. Después de quince
días de navegación, llegaron a Mira, y allí tomaron una nave alejandrina,
llegando finalmente a Puerto Bonito (Creta). El centurión Julio,
a pesar de las advertencias del Apóstol, por considerarse experimentado en
estas lides, tomó la decisión de partir. Para ello tomó en consideración la
opinión del piloto y del patrón, partidarios de invernar en el puerto
de Fenice, al parecer, el puerto más apropiado para pasar allí el
invierno. Pero durante el viaje les sobreviene una gran tempestad que termina
en naufragio.
Personajes: El centurión
encargado de la custodia de los prisioneros, entre ellos Pablo, llamado Julio.
Se nombra al ya mencionado con anterioridad Aristarco, macedonio natural de
Tesalónica; este acompañaría a Pablo, al menos durante una parte de su
viaje.
La tempestad:
Recorrido: El barco en
que se encuentra Pablo costeando frente a Creta fue sorprendido por un viento
huracanado (Euroclidón) procedente de la isla. Como consecuencia de este viento
fueron empujados frente a un islote llamado Cirte. A la deriva, fuera de su
ruta, intentaron no chocar contra las rocas de la costa por medio de distintos
procedimientos.
Sucesos: La tempestad
provocó la deriva del barco. Éste permaneció a merced de la tempestad mientras
ésta continuó durante varios días. La tripulación del navío intentó por todos
los medios mantenerlo a flote, pero, al prolongarse el temporal, con el paso de
los días cundió el desánimo. Pablo en todo momento intentó que sus acompañantes
mantuviesen la calma, comiesen y cobraran ánimo, ya que habían estado varios
días sin comer. El apóstol comunicó a la tripulación que había intercedido por
ellos ante el Espíritu y que no debían temer nada, pues ninguno de
ellos perdería la vida en este percance, ya que Dios así se lo había revelado a
él. Sin embargo, les advirtió que habría una pérdida total de los bienes
materiales. La tripulación, en medio del Mar Adriático, decidió
sondear la profundidad del mar, pero observaron que era escasa y decidieron
anclar la nave de todas las formas posibles, evitando, de esta manera, chocar
contra los escollos de la costa.
Personajes:
Los ya mencionados en el episodio anterior.3
El naufragio:
Recorrido:
Finalmente divisaron una ensenada con una playa frente a
las costas de Malta.
Sucesos: Al
divisar la ensenada, decidieron lanzar la nave hacia ella. Entre dos bancos de
tierra, la nave naufragó, siendo desmembrada por la fuerza del oleaje. Los
soldados decidieron matar a los prisioneros, pero el centurión, queriendo
salvar la vida de Pablo, se lo prohibió.
Personajes:
Aparece un cierto protagonismo de los soldados que intentan matar a los
prisioneros para que no escapen.4
En la isla de
Malta:
Recorrido:
Una vez a salvo, descubrieron que se encontraban en la isla de Malta.
Sucesos: El
Apóstol fue mordido por una víbora que se encontraba entre las ramas
que él recogía para echarlas para avivar la fogata con que todos se calentaban.
De inmediato, los nativos de la isla interpretaron el hecho como un signo
desfavorable para Pablo y como algún tipo de juicio divino. Pero al ver que no sufrió
daño alguno, los nativos cambiaron de opinión y hasta llegaron a decir que era
un dios.
Personajes:
Los nativos de la isla y el hombre principal del lugar (Publio), además del
padre de éste, que fue sanado por Dios al orar Pablo por él.5
Llegada a Roma: CAP.28:11
Recorrido: Reanudaron
la navegación, embarcándose en una nave alejandrina. Llegaron a Siracusa,
capital de Sicilia. Desde allí, costeando, llegaron al puerto
de Pozzuoli y, desde este lugar, por tierra hasta Roma.
Sucesos: En
Siracusa permanecieron tres días; en Pozzuoli una semana, en compañía de
hermanos. Finalmente, en Roma, fueron recibidos por cristianos de esta ciudad,
sabedores de que Pablo llegaba a la misma. Allí en Roma, permaneció dos años en
arresto domiciliario antes de que le llegara el turno de comparecer ante el
emperador, el César. En ese lapso se le concedieron ciertos privilegios y se le
permitió predicar el Evangelio a muchos. E incluso, estando allí arrestado,
escribió seis de sus cartas O EPISTOLAS.
Personajes: Los cristianos
de Roma y el soldado encargado de su custodia.6
Mercedes
Jiménez Espinosa